CARTA AL DIRECTOR: Jose Luis Velasco - Hijos del terror

Señor Director:

Hace algún tiempo, Mario, un niño de segundo básico de Temuco, tenía que representar un baile mapuche en el colegio. Pero se negó a hacerlo. Los esfuerzos de la profesora por convencerlo fueron inútiles. Finalmente explicó que odiaba a los mapuches porque habían quemado el camión de su papá y se había quedado sin trabajo.

He visto también dibujos de otros niños de La Araucanía, mapuches, que representan a los carabineros con colmillos ensangrentados y cachos, quizá producto de vivencias personales, quizá por lo que han escuchado de sus mayores.

Sin duda, la experiencia de violencia en las familias de ambos niños ha marcado definitivamente su vida y coartado, si no mutilado, los sueños e inocencia con la que todo niño tiene derecho a crecer. 

Eso ya debiera ser digno de nuestra mayor preocupación. Pero, peor aún, les estamos enseñando, como sociedad, a odiarse mutuamente y a generar una visión de su futuro en la que los otros son enemigos. 

He visto cómo grupos mapuches realizan actos de fuerza poniendo a los niños por delante, como escudos humanos dicen unos, porque es una actividad comunitaria (familiar), refrendan los otros. 

También he escuchado a no mapuches discriminar abierta y agresivamente a los que sí lo son delante de sus hijos. Evidentemente no podemos construir una sociedad mejor si cultivamos en las nuevas generaciones el odio, resentimiento y racismo no podemos esperar vivir en paz, ni menos hacer justicia, si miramos a los que son diferentes desde la trinchera del frente. 

Es necesario condenar y excluir la violencia, en todas sus formas, de toda relación social ahora, y educar en el conocimiento y respeto a la diversidad desde ya.

El camino del entendimiento y la paz es largo, pero tiene que partir hoy, con altura de miras, apertura de mente y generosidad de corazón. Es tarea de todos.

JOSÉ LUIS VELASCO

Director Ejecutivo de Educar y Emprender